SINOPSIS

Años 60. Tony Lip (Viggo Mortensen) es un rudo italoamericano del Bronx que es contratado como chófer del virtuoso pianista negro Don Shirley (Mahershala Ali). Ambos emprenderán un viaje para una gira de conciertos por el Sur de Estados Unidos, donde Tony deberá tener presente "El libro verde", una guía que indicaba los pocos establecimientos donde se aceptaba a los afroamericanos. Son dos personas que tendrán que hacer frente al racismo y los prejuicios, pero a las que el destino unirá, obligándoles a dejar de lado las diferencias para sobrevivir y prosperar en el viaje de sus vidas. (FILMAFFINITY)


UN POCO DE HISTORIA

Tras el triunfo del norte en la guerra de Secesión y la abolición de la esclavitud, los derechos de los negros quedaron expresamente protegidos por la Constitución de los Estados Unidos aunque esto no supuso el inicio de una relación armónica entre blancos y negros en el país. Los estados del Sur pusieron en marcha una serie de normas de segregación que en teoría no implicaba una merma de derechos, sino simplemente una aplicación por separado de los mismos, de modo que blancos y negros entraban por distintas puertas a los colegios o las piscinas públicas y bebían de distintos surtidores, pero todos podían gozar del agua, la educación y el ocio.

En los estados del norte la segregación no fue tan evidente. Ninguna ley prohibía a un negro tener una casa en Manhattan, pero aunque pudiese pagarla, nadie se la vendería. Los negros del norte, sobre todo en las grandes ciudades como Nueva York, se hacinaron en guetos con altas tasas de delincuencia, acabando por convertirse en un problema social muy difícil de atajar.

Los negros ocupaban los asientos de atrás en el autobús. El 1 de diciembre de 1955 Rosa Parks se convertía en una heroína de los derechos civiles al negarse a ceder su asiento a un blanco en Montgomery.

Había aseos públicos, andén de espera, entrada a las piscinas y fuentes sólo para negros.

Ley marcial para negros: En algunas ciudades del sur, para evitar conflictos, se obligaba a los negros a estar en casa a las diez de la noche.

Hospitales para blancos y negros.

Los negros no votaban: El primer sufragio negro en Estados Unidos data de 1965.

Escuelas para negros: En mayo de 1954 la Corte Suprema declaró ilegal la segregación racial en las escuelas de los Estados Unidos al entender que, siendo la educación un derecho esencial, la segregación generaba una desigualdad. No obstante, en 1957, Elizabeth Eckford y otros estudiantes afroamericanos tuvieron que ser escoltados por el ejército para poder acudir a clase de Secundaria en un Instituto de Arkansas.

Negros en las universidades sureñas: James Meredith, el primer negro graduado en la universidad de Missisipi, no lo tuvo nada fácil, tuvo que enfrentarse al gobernador Ross Barnett, un segregacionista radical para poder acudir a clase. La asistencia de Meredith a la universidad, provocó graves altercados que termino con los federales y los racistas enfrentados en un tiroteo con el resultado de treinta agentes heridos de bala. Al final, Meredith se graduaría en Ciencias Políticas en 1963.

La igualdad legal no llegaría hasta 1964, cuando el Presidente Johson firma la Ley de Derechos Civiles que prohibió la segregación en lugares públicos.

Hasta entonces, los negros que viajaban utilizaban “El Libro Verde”, una guía de viajes editada durante varias décadas y escrita por el cartero Victor Hugo Green, que detallaba los lugares (hoteles, restaurantes, etc.), en los que los negros eran bienvenidos. Esta es la guía que da título a la película y que Tony utiliza para buscar los alojamientos.


OPINIONES DE LOS ASISTENTES AL CLUB DE CINE

Ya hemos comentando varias películas en el club de cine, en la que los protagonistas emprenden un viaje que cambia sus vidas. Recordamos “La Diligencia”, “El Mago de Oz”, “Hacia rutas salvajes” o “Dos en la carretera”, por poner algunos ejemplos. En todos ellas hay personajes muy diferentes, incluso antagonistas, que a veces, no se tienen ninguna simpatía y, después de recorrer un camino, más o menos largo, terminan por comprenderse, respetarse o incluso forjar una gran amistad, cómo es el caso de esta maravillosa película.

Aunque es un poco previsible, solamente por las excelentes interpretaciones de los dos protagonistas, muy alejados de los papeles que habían interpretado hasta ahora, merece la pena verla. Los dos están colosales. Los personajes no pueden ser más diferentes – el Ying y el Yang-, pero hay algo que les une, algo que cada uno interpreta a su manera: la lealtad, el deber y el honor.

Nos recuerda a “Paseando a Miss Daisy”, sólo que en este caso los papeles se invierten.

Muy entretenida. A pesar de su duración, de más de dos horas, se hace muy corta. El trasfondo es dramático. Pensamos que si el guion hubiese sido menos ágil, la película hubiese podido ser un dramón, sin embargo, aunque tiene momentos dramáticos, la película es divertida, con momentos muy graciosos, destacando la escena del Kentucky Fried Chicken Los dos personajes, tan exageradamente extremos, tienen una química especial.

La ambientación es excelente. Los años 60 están perfectamente reflejados en la escenografía (vestuario, iluminación, decorados). La fotografía es preciosa, con unos colores vivos (nos encantan las tomas desde dentro del coche mostrándonos las enormes extensiones de los campos, cuando van atravesando los distintos estados). Muy luminosa en los momentos buenos y más oscura en los dramáticos.

Maravillosa, también la banda sonora con canciones de Little Richard, Aretha Franklin, Chubby Checker, entre otros y, por supuesto, del protagonista Don Shirley.

Los diálogos son uno de los puntos fuertes de la película, de ellos extraemos algunas frases que la resumen bastante bien:

• ¿Por qué no iba a acabar el trabajo?. Me he comprometido.
• “Es un genio, pero no parece divertido ser tan listo”.
• “No podía combinar el matrimonio con la música”.
• “Jamás ganarás siendo violento”.
• “La dignidad siempre prevalece”.
• “No sabe una mierda de su propia gente”.
• “Mi mundo es más negro que el suyo”.
• “No soy lo bastante negro, ni lo bastante blanco, ni lo bastante hombre”.
• “El mundo está lleno de gente solitaria que no da el primer paso”
• “Hay que tener valor para cambiar el corazón de la gente”.
• Mi padre siempre decía: “Hagas lo que hagas, hazlo al cien por cien”
No es el destino del viaje, si no el camino el que nos cambia.
La calificación de los asistentes al club de cine ha sido entre 1 y 5 estrellas:

**** = 6
***** = 3