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Biblioteca Pública Municipal

Libro Club de Cine / Película Actual



Se han cumplido 70 años del estreno de “La reina de África”, una de las peores experiencias de rodaje de un équipo cinematográfico.

LA REINA DE ÁFRICA

La reina de áfrica

FICHA TÉCNICA

Título original: The African Queen.

Año: 1951.

Duración: 106 min.

País: Estados Unidos.

Director: John Huston.

Guion: James Agee, John Huston (basada en la novela del escritor británico Cecil Scott Forester).

Música: Allan Gray.

Fotografía: Jack Cardiff..

Reparto: Humphrey Bogart, Katharine Hepburn, Robert Morley, Peter Bull, Theodore Bikel, Walter Gotell, Peter Swanwick, Richard Marner.

Productora: Coproducción Estados Unidos-Reino Unido; Horizon Pictures, Romulus. Productor: Sam Spiegel. Distribuidora: United Artists

Género: Aventuras.

PREMIOS

Oscar: Mejor actor (Humphrey Bogart). 4 nominaciones





SINOPSIS

Al estallar la Primera Guerra Mundial (1914-1918), Charlie Allnut (Bogart), un rudo capitán de barco con tendencia a la bebida, y Rose Sayer (Hepburn), una estirada y puritana misionera, huyen de las tropas alemanas en una ruinosa embarcación, con la que deben remontar un peligroso río. Son, a primera vista, dos seres antagónicos, incompatibles, pero la convivencia y, sobre todo, las penalidades que tendrán que afrontar juntos para sobrevivir harán cambiar radicalmente su relación. (FILMAFFINITY)


CURIOSIDADES

Peter Viertel, que escribiría después una libro sobre el rodaje de la película titulado “Cazador blanco, corazón negro”, y que había sido enviado por el productor para estabilizar a Huston, y fracasó en su intento; intuyendo que el rodaje sería un desastre, se negó a que su nombre apareciese en los créditos.

Jonh Huston quiso rodar esta película en África, contrariamente a lo que se hacía en la época, para poder ir de safari y cazar un elefante. Todo esto lo recogió Viertel en su novela, que después llevaría Clint Eastwood al cine, con el mismo título. También Katherine Hepburn publicó un libro en 1987, titulado “El rodaje de la reina de África”, en el que contaba todas las vicisitudes del azaroso rodaje en África.

Robert Morley, que interpretaba al misionero, fue el único actor del reparto que no tuvo que viajar a África. Todas sus escenas las pudo rodar cómodamente en los estudios de Londres.

Aunque las sanguijuelas que cubren el torso de Bogart en una de las escenas eran falsas, John Huston le hizo creer que, debido a un error del encargado de efectos especiales, algunas podían ser auténticas. Bogart, horrorizado, rodó la secuencia lo más deprisa que pudo con gesto de genuina repugnancia, cosa que aprovechó el director para dotar de realismo a la escena.
Durante el rodaje en el Congo, el calor era tan sofocante que los técnicos tenían que enterrar las latas con la película filmada en fosas subterráneas para evitar que el sol y la humedad la destruyése.

Menos Humphrey Bogart y el propio director, todos los demás miembros del rodaje, enfermaron de disentería. Cuentan, que ellos se libraron porque no bebieron una sola gota de agua en todo el rodaje; solo whisky escoces.

La película figura entre las 24 mejores películas de aventuras, las 32 mejores películas románticas de la historia del cine, y las 148 mejores películas estadounidenses de todos los tiempos.


OPINIONES DE LOS ASISTENTES AL CLUB DE CINE

Es curioso, que sin pretenderlo, la última película que comentamos en el club de cine aludiese a misioneros españoles en Alaska (Balarrasa), y está, sea de misioneros ingleses en África.

Un duelo de dos actores en la madurez, tanto física, como interpretativa; los dos, soberbios en sus papeles. Nos ha sorprendido Bogart, alejado del cliché de “tipo duro”, que ha sido su seña de identidad en tantas películas. En esta, hemos descubierto su “vena cómica”, y también su vulnerabilidad. Katherine Hepburn, está, como siempre, espectacular.

El núcleo de la película es el recorrido que ambos hacen río abajo – un viaje, tanto interior, como exterior-, que les cambiará la vida. El viaje saca la verdadera personalidad de cada uno. Los dos se van despojando de sus ataduras; ella, con cada prenda que se quita, se va liberando; y él, obligado, en parte por la determinación de ella (la escena de las botellas de ginebra vaciadas en el río), comienza a tener un propósito en la vida.

La trama, en algunos momentos, es un poco surrealista. Muchas escenas, nos parecen absurdas; hay su parte de sátira al colonialismo, y algunas cosas, vistas desde la óptica de nuestro tiempo, serían políticamente incorrectas.

Aunque le podríamos poner algunos “peros”; las fabulosas interpretaciones, la magnífica fotografía, los primeros planos, la música, las flores, las plantas, los puntos de humor, la exuberancia de África, y un buen guion, hacen de ella una película deliciosa.

La calificación de los asistentes al club de cine ha sido, entre una y cinco estrellas:

*** = 2
**** = 5

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