SINOPSIS

El analista Osborne Cox (John Malkovich) llega al cuartel general de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) en Arlington, Virginia, para una reunión ultrasecreta. Por desgracia para él, el secreto no tarda en salir a la luz: le han despedido. Cox no encaja muy bien la noticia y regresa a su casa en Georgetown, Washington DC, para entregarse a la redacción de sus memorias y a la bebida. Su esposa Katie (Tilda Swinton) está consternada, aunque no parece muy sorprendida. Ya hace tiempo que tiene una aventura con Harry Pfarrer (George Clooney), un agente federal casado, y empieza a hacer planes para dejar a Cox por Harry. En un barrio a las afueras de la capital, en un mundo totalmente diferente, Linda Litzke (Frances McDormand), empleada de Hardbodies Fitness Centers (Gimnasios Cuerpos Duros), tiene dificultad para concentrarse en su trabajo. Sólo piensa en hacerse la cirugía plástica total y decide confiar su plan a su compañero Chad (Brad Pitt). Linda no se da cuenta de que Ted Treffon (Richard Jenkins), el director del centro, está loco por ella. Cuando un disco de las memorias del analista de la CIA llega accidentalmente a manos de Linda y Chad, los dos deciden sacar provecho de esta casualidad. Pero Ted se preocupa con razón: “No puede salir nada bueno de esto”. Los acontecimientos se precipitan en una serie de oscuros e hilarantes encuentros fortuitos.


CURIOSIDADES

Los Coen juegan con la ventaja de que trabajan siempre con un mismo equipo (maquilladores, decoradores diseñadoras de vestuario…) y con actores que ya conocen, en este caso, todos los actores habían trabajado ya en muchas de sus películas, salvo Brad Pitt y John Malkovich. Los hermanos cuentan que escribieron los papeles pensando en los actores y expresamente para cada uno de ellos.

Frances McDormand que lleva 25 años trabajando con ellos, desde su primera película “Sangre fácil”, está casada con Joel Coen, el mayor de los hermanos.

“Quemar después de leer” se iba a filmar antes de “No es país para viejos”, pero al final tuvo que ser al revés por los calendarios de rodaje de los actores protagonistas.

Al principio se decidió que casi todas las escenas se rodarían en Washington, donde transcurre la historia, pero la mayoría del rodaje tuvo lugar en Nueva York porque los directores querían estar cerca de sus familias y porque George Clooney rodaba otra película en la ciudad y sus alrededores.


OPINIONES DE LOS ASISTENTES AL CLUB DE CINE

Una comedia con tintes de tragedia, como todo lo que hacen los hermanos Coen, llena de guiños, con personajes aparentemente absurdos, pero que reflejan muy bien la sociedad en la que vivimos.

Nos ha parecido muy interesante que relacione el mundo de los gimnasios y la altas esferas políticas, ridiculizándolos con unos personajes estrambóticos y bastantes simples que da un poco de miedo que sean los que están al mando de las instituciones que nos gobiernan.

Aunque la película es muy entretenida, a algunos asistentes les parece que le falta construcción, como si la hubiesen hecho deprisa. La película cumple bien su función de comedia, que es hacer reír, aunque el trasfondo es totalmente dramático.

Los actores están impecables en general. Un reparto de lujo con brillantes interpretaciones (Brad Pitt,  fabuloso en un personaje totalmente nuevo, genial vestido de monitor de gimnasio, con calcetines altos y masticando chicle compulsivamente); los demás actores muy buenos en general -George Clooney, tan versátil, como siempre, puede cambiar de registro cuando quiera y siempre está impecable-; Frances McDorman, borda como siempre su papel – nos encanta la expresión de su cara y su absurda obsesión por la cirugía estética y Jonh Malkovich interpretándose a sí mismo, el papel le va como anillo al dedo.

Muy recomendable, aunque no es la mejor película de los Coen, es muy entretenida y con unos puntos de humor memorables.

La calificación de los asistentes al club de cine  ha sido entre 1 y 5  estrellas:

*** = 6
**** = 3