SINOPSIS

Mujeres de ojos grandes son cuentos inteligentes, divertidos, sagaces y críticos. Leyendo las historias de las tías, es posible que encontremos, entre ellas, alguna sombra nuestra, de alguna de nuestras vecinas, amigas o, quizás también, de nuestras enemigas. Es un libro que vale la pena leer y divulgar entre mujeres y entre hombres que buscan un orden de las cosas diferente.

Mujeres de ojos grandes es un conjunto de treinta y siete cuentos cortos, contados en tercera persona. La narradora, que conoce muy bien hasta los más recónditos pensamientos, sentimientos, intenciones y acciones de cada uno de los personajes, nos presenta la historia de una colección de treinta y siete tías. Al describir a cada una de esas tantas mujeres, la narradora nos va colocando un delicado contrapunto entre las “expectativas de género”, es decir, lo que en la sociedad y cultura tradicional mexicana es aceptable y esperado del comportamiento de hombres y mujeres, y lo que, de hecho, ellos y ellas son capaces de sentir, creer, pensar, desear, imaginar, soñar, crear, decir y vivir. El estilo de la narración es sutil y creativo y nos lleva a ver, en cada una de las historias, una protagonista única y especial: una mujer con ojos grandes.


SOBRE LA AUTORA

Ángeles Mastretta, escritora mexicana nacida en Puebla en 1949. Licenciada en Periodismo, su primera novela Arráncame la vida (1985) fue elogiada por la crítica y fue un éxito de ventas. A ésta siguieron entre otras, Mujeres de ojos grandes (1995) y Mal de amores (1997). Es catedrática de la Escuela Nacional de Estudios Políticos de Acatlán y colaboradora de varias revistas. Autora de singulares novelas en las que se combinan las caricias del buen amor con las posibilidades de ser feliz, muestra a las mujeres como depositarias de una sabiduría femenina anterior a toda revolución emancipadora. En 1997 obtuvo el prestigioso premio Rómulo Gallegos por su novela Mal de amores.


CALIFICACIÓN

*
**  3
*** 17
**** 7
***** 3


COMENTARIOS

- Es el retrato de la MUJER presente en cada relato.

- Son muchas historias reales con las que nos identificamos nosotros mismos, en algunas de las diferentes tías.

- Resaltamos los relatos de la tía Chila, Teresa, Elvira , Jacinta y Marcela.

- Ha gustado cómo está escrito el libro, con humor y con párrafos muy buenos, sin olvidar el realismo mágico. También ha gustado que los relatos tuvieran un final abierto y cada uno lo interpretara de diferente manera según su imaginación.

- Es un libro ameno de leer, por ser relatos cortos. Puedes dejar y retomar la lectura sin “perder el hilo”.

- Algunos lectores nos les han gustado todos los relatos y los han leído por obligación (como cuando tienes que comerte una comida que no te gusta) bien por su contenido o porque no se entendían bien y han tenido que leerlos más de una vez.

- Han resaltado el aspecto repetitivo de tener amantes y de ser “matrimonios falsos” en muchos relatos. También que es un poco absurda la finalidad del libro, que una mujer con su hija en estado de coma quiera contarle estas historias.

- Es un buen libro para comentarlo en el club de lectura por los debates que ha suscitado, incluso comentar un solo relato en cada sesión.


FRAGMENTOS

- Hay gente con la que la vida se ensaña, gente que no tiene una mala racha sino una sucesión de tormentas. Casi siempre esa gente se vuelve lacrimosa. Cuando alguien la encuentra, se pone a contar sus desgracias, hasta que otra de sus desgracias acaba siendo que nadie quiere encontrársela.

- Hay muchas maneras de dividir a los seres humanos – le dijo-. Yo los divido entre los que se arrugan para arriba y los que se arrugan para abajo, y quiero pertenecer a los primeros. Quiero que mi cara de vieja no sea triste, quiero tener las arrugas de la risa y llevármelas conmigo al otro mundo.

- Ninguna buena persona tenía que ser por fuerza productiva y menos aún empeñarse en que otros lo fueran. Declaró a los periódicos todo lo que puedo en contra de quienes pretenden que la productividad sea el único criterio para juzgar a los seres humanos, aprovechó para criticar a quienes lo único que buscan en la vida es el poder y el dinero…

- ¿Si yo me fuera podrías brincar la reata? –preguntó él.

- Creo que no- dijo la tía Magdalena.

- Entonces me quedo – contestó el marido, recuperando su alma. Y se quedó.

- A la gente le cuesta trabajo soportar la felicidad ajena (...). Y si la felicidad viene de lo que parece ser un acuerdo con otro, entonces simplemente no es soportable.

- Creo que el amor, como la eternidad, es una ambición. Una hermosa ambición de los humanos.

- Cada luna es distinta. Cada luna tiene su propia historia. Dichosos quienes pueden olvidar su mejor luna.

- ¿Quién investiga en tus ojos?.

- Donde hay rencor, hay recuerdo.

- No arruines el presente lamentándote por el pasado ni preocupándote por el futuro.